La gripe es una enfermedad del aparato respiratorio causada por un virus (virus de la influenza), que se transmite de una persona a otra a través de la tos, estornudos y objetos directamente contaminados.Los síntomas más frecuentes de esta enfermedad son, además del quebrantamiento del estado general, la fiebre alta, dolores musculares y de cabeza, estornudos,...
Aunque no hay nada que cure la gripe, si que existen una serie de plantas que pueden aliviar sus síntomas. Este tratamiento natural, ayuda a impedir el contagio de la enfermedad o a disminuir sus síntomas y su duración.
Esta enfermedad tiene características comunes con el resfriado, por lo que muchas de las plantas que alivian los síntomas del resfriado también alivian estos síntomas, como la Menta (Mentha Piperita), la Tila (Tilia cordata), la Madreselva (Lonicera Caprifolium), el Regaliz (Glycyrrhiza glabra), el Abedul (Betula alba L.) y el Jengibre (Zingiber officinale).
Otra posible alternativa es la Borraja (Borrago Officinalis L.), ya que contiene gran cantidad de minerales y vitamina C y además, aumenta la sudoración. La forma de preparación es en forma de infusión, añadiendo una cucharada de hojas secas por taza. Tomar tres veces al día.
Además la Equinácea (Echinacea), al ser considerada el mejor antibiótico natural, disminuye los síntomas de la gripe así como su duración. Esta planta se toma en forma de cápsulas, administrando 1.000 mg diarios repartidos en cinco tomas.
El Hibiscus (Hibiscus sp.), al contener gran cantidad de ácido cítrico, rebaja la fiebre. Para producir este efecto, se puede preparar una infusión con una cucharadita de pétalos secos por vaso de agua dos veces al día.
La Lavanda y el Espliego (Lavándula officinalis, Lavándula Latifolia), ayudan a disminuir los efectos negativos de esta enfermedad gracias a sus propiedades antivíricas, que rebajan los problemas respiratorios. Se suele tomar en forma de infusión con una cucharada de hojas secas por taza de agua. Sandra Gómez Gracianea |
